Un restaurante fuera de lo común

El primer restaurante-escuela del país está en Punta del Este

En la parada 12 de la playa Mansa de Punta del Este, frente al mar, hay un parador que se distingue dentro de la oferta gastronómica del balneario tanto por sus buenos precios como por el emprendimiento que lo respalda. Se trata de la Escuela de Alta Gastronomía, que tiene allí un restaurante atendido por estudiantes y pasantes de la UTU. Casas en el Este visitó el lugar y conversó con sus responsables para conocer más sobre este importante proyecto.

De todas partes vienen

La Escuela de Alta Gastronomía de Punta del Este  surgió en enero del 2012 luego de un comodato entre la Intendencia de Maldonado y el Consejo Técnico Profesional. El primer año fue un restaurante y al siguiente se hizo restaurante-escuela y se convirtió en el único en Uruguay. Aquí, muchos estudiantes o recién egresados de distintas partes del país pueden tener su primera experiencia laboral. Llegan jóvenes de Bella Unión o Tacuarembó, e incluso algunos chicos que no conocían la costa del país.

Según nos contó Graciela Pérez, actual docente y ex subdirectora de la escuela, el instituto permite a los jóvenes recibir no solo la formación teórica en los cursos, sino también la parte práctica. Los estudiantes pueden optar por dos metodologías: pasantía remunerada por 18 meses o una capacitación por el verano donde se les brinda casa, pasajes y comida a los estudiantes de UTU que vayan a hacer su práctica allí. Además también hay capacitaciones para docentes.

Una nueva experiencia

El sistema de restaurante-escuela que propone la Escuela Alta de Gastronomía es innovador e inédito en Uruguay. Esta novedad corre tanto para clientes como para estudiantes y docentes, por y proporciona un valor simbólico agregado a la hora de sentarnos a comer.

Ese plus que se siente en el lugar es registrado en el libro de visitas del restaurante, donde los clientes pueden describir sus experiencias, generalmente buenas. “Hay gente que se interesa, que le gusta. Ha venido gente que hace eventos porque es una escuela y quieren ayudar”, nos contó Julián, de 19 años, quien está haciendo la pasantía.

Por su parte, todos los estudiantes se llevan la experiencia de trabajar en un restaurante de alta gastronomía con diferentes referentes de sala bar y de cocina. Allí los chicos tienen contacto continuo con clientes y turistas que hablan distintos idiomas. “Algunos de los chicos saben inglés y entre ellos se ayudan, es muy interesante y gratificante acompañarlos”, nos contó Graciela.

Muchas veces, cuando un cliente es asiduo, el chef se acerca a la mesa y le cuenta sobre el proyecto de la Escuela. El público toma muy bien la explicación e incentiva a los jóvenes a continuar trabajando. “Acá tenés un margen más grande para equivocarte e ir aprendiendo porque te ayudan mucho, además viene gente buscando personal para otras empresas y hacer contactos”, nos contaba Julián.

Comer frente al mar

La Escuela de Alta Gastronomía abre todo el año los fines de semana y en verano todos los días. En invierno la carta es reducida y ofrecen un menú diario que ronda en los $ 490 con entrada, plato principal, postre y bebida.

Actualmente, la Escuela está preparando la carta de verano, lo que implica el trabajo y la creación de los propios estudiantes. Hubo alguna renovación para la nueva temporada donde se sacaron platos que no eran tan pedidos y los cambiaron por propuestas nuevas, recomendadas por los propios pasantes de cocina, siempre con el asesoramiento del chef referente.

Recomendados del menú: es muy variado con especial foco en las  pastas, carnes y las entradas, todas muy recomendables. En verano lo más pedido son las minutas, milanesas, rabas y frutos del mar, algo rápido para picar mientras estamos en la playa.

Tragos: es uno de los puntos altos del parador. Hay bebidas de todo tipo, ideales para sacarse el calor sentados en una reposera, observando el hermoso panorama de la Playa Mansa.

Y además, uno de los grandes puntos a favor de la Escuela de Alta Gastronomía es que, además de estar ayudando a los jóvenes a profesionalizarse, los turistas pueden degustar platos exquisitos a un precio bastante menor que el habitual en  los paradores de la rambla de Punta del Este.

Contacto:

Parada 12 de la Playa Mansa, Punta del Este.

Teléfono: 4248 8808