Bioconstrucción: alternativa ecológica para tu casa en el este
Hacernos el nido con nuestras propias manos, como hacen los pájaros y otros animales. Acercarnos más a la tierra, construir una casa con elementos vivos, naturales. Un hogar que siente y respira como una segunda piel. Estas posibilidades son las que llevan cada vez a más personas a optar por la bioconstrucción como método para construir sus viviendas. Una alternativa sustentable que encuentra en las costas de Uruguay un escenario perfecto para su realización.

Casa con techo verde y paredes de adobe (Foto: Web Centro Huellas)
La bioconstrucción se caracteriza por utilizar elementos dispuestos en la naturaleza -barro, paja, piedras o maderas, entre otros- para la construcción de viviendas. Por supuesto, esto no es nada nuevo: se trata de una técnica milenaria que varias familias han revalorizado en los últimos años. Aunque la vida de la ciudad nos lleve a pensar que no podemos vivir en una casa que no sea de cemento, hoy se sabe que más de la mitad de la población del mundo vive en casas de este tipo.
Del barro venimos
La metodología más habitual para este tipo de construcción es la fajina, donde se realiza un entramado de cañas o maderas que se va rellenando con el barro. Este material, además de ser muy accesible y permitir la bioconstrucción, tiene una conexión muy especial con la vida humana desde tiempos ancestrales. Incluso las cosmogonías más citadas como el Popol Vuh de los Mayas, refieren al barro como la materia de la que se hicieron los primeros hombres.

Así se ve el proceso de construcción con entramado de cañas y nbsp;madera (Foto: Sado Colectivo)
“Tenía la inquietud de vincularme con el barro, poder hacer mi propia casa con mis propias manos, con la tierra de donde venimos y a donde terminamos yendo”, nos cuenta
Juan Tuduri, quien luego de haber estudiado bioconstrucción y huerta orgánica en la UTU de Arrayanes, formó junto a sus amigos el grupo Furnarius para el desarrollo de proyectos autosustentables en el Este del país.
Ahorro y sostenibilidad
Otra de las ventajas que aporta la bioconstrucción es que se trata de una técnica relativamente sencilla. No requiere equipos sofisticados ni mano de obra calificada, entonces permite involucrar a toda la familia, “los niños o los más ancianos pueden aportar su granito de arena y construirse su propia casa”, explicó Juan.

Confeccionando ladrillos de adobe (Foto: Sado Colectivo)
Son muchos los factores de ahorro en este método sostenible. Por un lado, hay una amplia disponibilidad de la materia prima, entonces el costo es muy bajo, incluso en los casos que requieren comprar material extra. Se ahorra además en el transporte de los materiales porque generalmente están en el propio terreno. Por otro lado, este tipo de viviendas genera un efecto de retraso térmico que conserva las casas cálidas en invierno y frescas en verano, lo que deriva en ahorro energético.
Saber interpretar
El diseño de la construcción va a depender del clima y del ambiente. Nuestro país está caracterizado por tener lluvias intensas, entonces es importante que la casa tenga “buenas botas y un buen sombrero”. Es decir, la estructura inferior de la casa tiene que tener zócalos de piedra o un buen revoque, y el techo con un gran alero que proteja la construcción.
Pero lo importante de un proyecto sustentable es poder interpretar y analizar el contexto donde se va a construir antes de empezar a elevar la vivienda. “El conocimiento es lo que hace al proyecto sustentable”, nos explica Juan.

Interior de una casa construída con materiales amigables con la naturaleza
(Foto:Bioconstrucción y diseño de casas naturales)
Mantenimiento
Las casas bioconstruídas requieren mantenimiento como una casa habitual, pero por estar hecha con elementos vivos, el vínculo con la vivienda es distinto al que se puede tener con un apartamento en la ciudad, .
”Es otra la interrelación con el medio ambiente, va evolucionando y mutando en la medida que vos también vas mutando. El barro se mueve, se contrae en el primer año, pero después se logra una estabilidad y podés estar 10 años sin tocarla. De todos modos siempre es bueno mantenerla”.
Para los interesados en descubrir más sobre el tema, compartimos este interesante documental sobre bioconstrucción realizado por Tevé Ciudad:
Permacultura y pequeños cambios que todos podemos hacer
La bioconstrucción es una señal de que parte de la sociedad está buscando cambiar su forma de vida y de relacionarse con el medio ambiente. De ese deseo surge el concepto de Permacultura, que refiere a “cultura permanente” e intenta alejarse de la predominante sociedad de consumo.
La permacultura es una forma de vivir autosustentable sin desperdiciar los bienes naturales. Si bien es muy difícil abstraerse completamente de la sociedad de consumo, la idea es “seguir jugando con las mismas reglas de hoy en día pero de una forma más amena para la tierra y nosotros”.
Hay varias alternativas para los que deseen innovar hacia una vida más sustentable y responsable en su propia casa, sin necesidad de levantar una vivienda ecológica nueva. Una de las opciones más conocidas son los techos vivos con pasto, con un sistema de filtrado de agua de lluvia. También se está extendiendo el cultivo de alimentos en huertas orgánicas y el uso de paneles solares. Este tipo de acciones se pueden implementar en cualquier casa, sin ser condición necesaria que haya sido bioconstruída. Te dejamos más información sobre esto último ofrecemos en nuestra nota: Tips para que tu casa se amigue con el medio ambiente.

